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Pintado de Rojo y Blanco

Un grupo de socios e hinchas, se acercó hasta la esquina de Timote y Castro, para pintar de rojo y blanco las paredes de aquél sueño que imaginaron apellidos ilustres. Cuentan quienes estuvieron, que cuando miraron al cielo


 

¡Cumpleaños 108! Comelli, Perinetti, Pyke, Mc Lennan, Rezzoagli….Apellidos ilustres entre otros, que comenzaron a escribir la historia mas apasionante que puede oírse por el barrio de “Los Talleres”, un 1ro de junio de 1906, jamás imaginaron, que 108 años después, su fuerza creadora, su impulso e ímpetu adolescente que dió origen a Talleres como un club de fútbol, hubiera dejado este fin de semana, historias de deportes que hacen a Talleres como institución, como “Club Atlético Talleres”.

Los chicos de inferiores e infantiles, jugando el sábado por la mañana; la victoria como visitante de la primera división del básquet masculino, que es de primera, y las categorías menores haciendo las veces de local en el renovado Mallakis. Celebra la comunidad de handball femenino los triunfos sobre Independiente, se esmeran las chicas de Gimnasia Artística, se echan a rodar las ruedas de las jóvenes de patín. Festeja la primera división del básquet femenino frente a Argentinos Juniors porque los puntos se quedan en casa.

Como en Talleres el lugar de la mujer es relevante, se calzan los botines –quien lo hubiera dicho- las chicas del fútbol femenino para gritar con el alma un gol en el nuevo predio de Talleres, que luce a nuevo con la inauguración de las nuevas canchas de tenis. Se prepara el judo para hacer historia, y el taekwondo le da la mano para escribirla juntos, mientras futsal está listo para competir. Se ilusionan los chicos de la escuelita detrás del balón, y se alegran los muchachos de Gimnasia deportiva porque Talleres los unió como grandes amigos. Todos ellos, también, esperan con renovada esperanza el comienzo de una nueva ilusión, y que la pelota, vuelva a rodar…

Y por último, un grupo de socios e hinchas, se acercó hasta la esquina de Timote y Castro, para pintar de rojo y blanco las paredes de aquél sueño que imaginaron apellidos ilustres. Cuentan quienes estuvieron, que cuando miraron al cielo, Comelli y los suyos, estaban felices…

 

Ariel Cappelletti Socio 20.581

Fotografía: Gentileza Mono Gómez